La receta de Battle Chef Brigade
Para esta receta necesitaremos (por persona):
- 100g de bolitas de colores para el sofrito
- 25g de plataformeo ligerito en 2D
- 25g de combate (del sencillito)
- 3 minijuegos para el acompañamiento
- Especias de Historia y Personajes para el aderezo
Lo primero es preparar el sofrito de bolitas de colores, una base tan sencilla como sabrosa que nos servirá de base para el resto de ingredientes.
La base del gameplay de Battle Chef Brigade es una que hemos visto en múltiples ocasiones, una cuadricula con bolitas de distintos colores que deberemos alinear en grupos de tres. Al hacerlo, se creara una bola del siguiente nivel y así hasta alcanzar el nivel tres. Al principio tendremos solo tres colores, rojo, azul y verde, representando el fuego, el agua y la tierra, pero a medida que avancemos, esto se irá complicando de distintas maneras. Las cuadriculas se giran en un sentido u otro en grupos de 4 así que alinear los ingredientes requiere cierta atención para que queden colocados de la manera en que queremos.
Cuantas mas bolitas de colores y sobre todo, de cuanto mayor nivel sean, mayor será la puntuación de nuestro plato, por lo que deberemos intentar llenar esa cuadricula de 4x4 tanto como podamos y con las mejores combinaciones que seamos capaces de formar.
Una vez asentado el sofrito, le echamos encima el combate ligero en taquitos para que el plato tenga algo de consistencia.
La gracia aqui es que esos orbes de colores los introducimos nosotros en la cuadricula a través de los distintos ingredientes que el juego nos ofrece y que deberemos recolectar manualmente. Junto a nuestra cocina habrá un escenario plagado de monstruos y plantas de los que podemos extraer los ingredientes que necesitamos, ya sea cazándolos o recogiéndolos del suelo.
Estas secciones son una mezcla de plataformeo y combate en 2D bastante ligeras. A excepción de los monstruos mas peligrosos de cada escenario, como el dragón o la hidra, recolectar estos ingredientes no es complicado y como tenemos un limite de ingredientes en la bolsa, deberemos estar volviendo a la cocina cada poco tiempo a dejar lo que hemos acumulado. Si tenemos la mala suerte de caer derrotados, perderemos algo de tiempo y tendremos que volver a recoger lo que llevásemos en la bolsa, que se habrá esparcido donde hubiéramos caído.
Removemos el sofrito de bolitas de colores con los taquitos para que los sabores se mezclen bien.
Cada nivel tendrá una batalla contra un chef distinto en la que los jueces nos pedirán que preparemos uno o mas platos con un tipo de ingrediente como base, que puede ser algún vegetal o cualquiera de las partes de un monstruo en especifico. Además, cada juez tiene preferencia por uno o mas tipos de sabor (fuego, tierra y agua), así que tendremos que intentar cocinar esos ingredientes teniendo en cuenta el paladar de nuestros comensales. Todo esto con una cuenta atrás que nos marca un tiempo limite en el que poner un plato sobre la mesa de los jueces.
El resultado de unir los puzles de bolitas con esas secciones de combate ligero dan como resultado a una experiencia de juego bastante agradable, en la que se van intercalando los momentos frente a los fogones con la exploración y búsqueda de ingredientes. La variedad de movimientos, sin ser ningún espectáculo, es lo bastante amplia como para que resulte interesante y que esta secciones puedan servir de contrapunto a la parte de puzle, pero aunque puedan parecer partes diferenciadas, están mas unidas de lo que puede parecer.
Para empezar a cocinar necesitas los ingredientes, así que tienes que ir a buscarlos, pero hay una cuenta atrás que se reduce si los monstruos te derrotan, por lo que hay que intentar ser rápidos, pero no imprudentes. La estrategia básica de ir a buscar tantos ingredientes como podamos antes de empezar a cocinar funciona durante los primeros niveles, pero el juego te exige cada vez mas que planifiques como va a ser esta recolección y cuanto tiempo te vas a dejar de margen para cocinar esos ingredientes.
Cada ingrediente tiene asociado uno o mas colores, por lo que si los jueces nos piden agua y tierra, no tiene sentido perder el tiempo buscando ingredientes de fuego. Aquí entra en juego la experiencia que vamos acumulando mientras jugamos, que nos ayudará a recordar que monstruos nos interesa cazar y con cuales no debemos perder el tiempo y para eso hace falta haber cocinado un par de platos para entender como combinan mejor esos ingredientes.
Recordad ir poniendo en remojo las ollas y sartenes, que el que limpia mientras cocina, trabaja menos con la panza llena.
En nuestra cocina contaremos con distintos tipos de ollas y sartenes, además de otros útiles de cocina que nos servirán para preparar los platos o mejorar su puntuación ante los jueces. Habrá ollas que hagan combinaciones mas rápidas de un color en concreto, otras que vayan mejorando el nivel de los orbes individualmente a fuego lento.
Además, llegado a cierto punto del juego, se introducen los orbes "negativos" que consisten en huesos y núcleos tóxicos, que deberemos eliminar de alguna manera o seremos penalizados por los jueces. Hay distintas formas de gestionar estos obstáculos en función de las ollas y sartenes que hayamos decidido utilizar.
Los útiles de cocina son bastante variados, tenemos ingredientes que estarán en nuestra despensa nada mas comenzar el duelo; especias, que cambian el color de los orbes o recetarios que nos darán puntos extra si cumplimos ciertas condiciones (haber usado todas las partes de un monstruo, usar solo vegetales, etc.)
También hay mejoras que actúan en la fase de caza y recolección, permitiendo tener mas puntos de vida o de maná, modificar nuestras habilidades o aumentando el tamaño de nuestra mochila, dándole también un puntito de variedad a este segmento.
Y ahora que el plato principal esta listo, vamos con un acompañamiento que nos sirva de complemento.
Antes de los duelos de cocina, dispondremos de tiempo libre en el que realizar algunas tareas. Salvo que por razones de historia nos digan lo contrario, estas actividades no son obligatorias y tan solo sirven para practicar un poco las mecánicas base del juego y de paso conseguir algunas monedillas, pero como buen acompañamiento, suma al conjunto y si no tienes sitio en la barriga, lo puedes dejar apartado.
La primera de las tareas son una serie de puzles en las que deberemos aplicar distintas técnicas y sistemas del juego para alcanzar platos con una valoración determinada. Si tuviera que recomendar uno de los tres minijuegos como imprescindible seria este, ya que sirve para entender mejor los conceptos que el juego va introduciendo poco a poco, como el uso de las salsas o como manejar los huesos o bolitas dañadas.
Luego viene la caza, en la que nos llevaran a uno de los escenarios a cazar X numero de monstruos. No tiene mucho mas misterio y si la parte de caza/recolección no os termina de convencer, pues estas misiones tampoco serán especialmente entretenidas para vosotros.
Y finalmente la cocina rápida, en la que deberemos replicar un patrón de bolitas de colores tan rápido como podamos. Las comandas se van acumulando y, aunque no tengamos un mínimo que cumplir, cuantas mas consigamos despejar, mayor la recompensa al final del minijuiego.
Para armonizarlo todo un poco espolvoreamos una pizca de historia y personajes por encima.
El juego cuenta la historia de Mina Han, una chica joven que sueña con salir de casa de sus padres y unirse a la brigada real de chefs, que viene a ser la mayor orden de caballería del mundo, pero además cocinan. Para poder unirse a ellos deberá superar un torneo en el que participan cientos de personas de todo el continente. Sin embargo, a mitad de torneo una plaga empieza a asolar la tierra y las cosas se complicaran un poco.
Siendo sincero, la premisa es tirando a insulsa, no tiene demasiado cuerpo y todo sucede según el libro de texto de esta clase de historias, pero al mismo tiempo, presenta unos personajes capaces de suplir todas las carencias del argumento.
Mina, Thrash, Kirin, Ziggy y compañía derrochan personalidad por todos los poros. Los "tutores" que te guian durante los minijuegos son bastante carismáticos cada uno a su manera (en especial Thorn, la maestra cazadora). E incluso los jueces o algunos competidores mas secundarios, consiguen transmitir mucho en apenas unas pocas líneas.
Juega mucho en favor de esto que el diseño de los personajes sea tan variopinto y interesante, pero sobre todo el hecho que los distintos sprites con los que cuentan son super expresivos.
Aunque a mi me gusta así, conozco un orco que lo prepara mucho mas picante.
Llegado a cierto punto de la historia, dejaremos a Mina apartada un tiempecito para ponernos a los mandos de Thrash, el enorme orco que conoceremos al empezar el torneo. A pesar de su apariencia es un tipo majo y tiene su propia historia y motivaciones para estar donde está, que nos cuentan en una especie de paréntesis en la historia de protagonista.
Thrash es un cocinero totalmente distinto a Mina y esto se ve reflejado tanto en los utensilios de cocina que tiene, como en su set de movimientos en la sección de caza y recolección, por lo que al darse este cambio deberemos ajustar nuestra forma de jugar.
El orco es mucho mas fuerte que la humana, pero también es bastante mas lento, además su estilo de cocina se basa mucho en preparar comida de elemento fuego y aunque esto último siempre se puede cambiar, comprando nuevos utensilios de cocina, hacerlo requiere algo de tiempo que nos obliga si o si a pasar por esta nueva forma de jugar durante al menos uno o dos duelos de cocina.
Fue con este cambio que me di cuenta de cuanto me había acomodado a un estilo concreto y como el juego ofrece un amplio abanico de posibilidades para que encuentres tu propio estilo. Y esta misma reflexión fue la respuesta a una queja que yo mismo había formulado hacia el juego.
Antes de empezar los duelos de cocina, el juego nos abre el menú de utensilios para que hagamos los cambios y ajustes que creamos convenientes. La cosa es que esto sucede ANTES de saber que ingredientes o que tipo de sabor nos van a pedir, por lo que no podemos prever que será mas útil. De esta manera el juego nos pide que vayamos formando un estilo propio.
Si el juego te dejase cambiar sabiendo lo que te piden, no solo seria mucho mas fácil, sino que no estarías construyéndote esa identidad como cocinero. Parte de la historia del juego y el punto en común de casi todos los personajes, es el amor por la cocina expresado en distintas formas y a través de este sistema en el que podemos configurar nuestra cocina como mas nos guste, el juego intenta trasladar esa diversidad de perspectivas tras los fogones.
Y con esto ya estaría terminado, servidlo con la salsa que mas os guste...
Si os quedáis con ganas de repetir, el juego incluye duelos de cocina diarios, desafíos personalizables y un modo VS a pantalla partida, así que una vez terminada la historia principal, podéis exprimir un poquito mas el juego.
Para mi, debo decir que ha sido una experiencia la mar de satisfactoria, el juego consigue no hacerse aburrido a base de ir introduciendo pequeños cambios en sus dinámicas poco a poco y el paréntesis de Thrash llega justo a tiempo para evitar que la repetición se haga tediosa.
Para mi propia sorpresa, porque no apostaba mucho por este titulo cuando lo arranqué la primera vez, es un juego que he disfrutado de manera sincera y al que no me importaría echarle un par de horitas mas en los retos diarios.
... Y buen provecho
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